Sé que el día del libro ya pasó, pero las historias deberían quedarse... Esta es la mía para hoy :)
Se graduó como pirata de cubierta de carabela y se embarcó por primera vez, bajo el tímido sol de un mes de abril, sobre un mar de aguas frías y profundas que surcó con la ilusión de los primeros años de oficio. Aquella primera travesía le valió conocer y aprestarse en todas las faenas que un barco es capaz de proponer a un pirata.
Se graduó como pirata de cubierta de carabela y se embarcó por primera vez, bajo el tímido sol de un mes de abril, sobre un mar de aguas frías y profundas que surcó con la ilusión de los primeros años de oficio. Aquella primera travesía le valió conocer y aprestarse en todas las faenas que un barco es capaz de proponer a un pirata.
Con
la piel ya curtida por el sol, su segunda carabela lo llevó a enfrentar el mar
de los arrecifes y el acero inmisericorde de los malditos y le descubrió los
secretos que se esconden en los rincones más oscuros de las bodegas.
Valeroso,
audaz, intrépido y leal, fiel siempre al código de su bandera, conoció un
sinfín de capitanes sin que ninguno fuera capaz de conquistar por derecho su
respeto, hasta que una tarde reclamó y consiguió para sí una plaza en el
codiciado galeón de las velas blancas y
el mascarón dorado y se hizo nuevamente a la mar con la ilusión propia del
pirata joven que había sido, dispuesto a alcanzar el sueño que siempre llevó
prendido de su pañuelo y seguro de haber encontrado el puerto que siempre lo
mantendría al abrigo de las mareas.
Pero aquel mar purpurado y aquel galeón dorado
resultaron ser los más despiadados y traicioneros de todos los que había
surcado y su sueño de aguas templadas se perdió en la espuma de las olas de las
tormentas que azotaron su cubierta sin razón y sin tregua…
Hubiera
resistido… saberlo probablemente sea la herida que nunca deje de doler… El
acero de su espada también hubiera aguantado, no en vano mil veces la afiló en
la roca de las sirenas… pero cometió el error de creer que aquel otro pirata
que fue su amigo y por el que tantas veces arriesgó su propia vida, sería capaz
del mismo valor cuando tuvo la suya en sus manos… aún viéndose en el agua
siguió confiando… mojado, herido y agotado, aún en medio de la noche salada siguió esperando… hasta que la mordida del tiburón de las seis aletas, que arrancó de
cuajo su pata derecha, lo obligó a admitir que lo había dejado caer, que aún
viéndolo solo e indefenso en el agua, lo había abandonado a su suerte…
No
puede recordar cómo acertó a alcanzar la orilla de aquella playa, ni olvidar el
dolor de aquellos días en que la fiebre lo volvía loco y a veces se pregunta si
aquel tiburón de las seis aletas, además de su pata, no se llevaría también
entre sus dientes su gusanillo de hacerse a la mar porque lo cierto es que
ahora, cuando sueña, sus pasos repiquetean sobre el suelo de la cabaña de la
isla en la que enterró su cofre y su mirada añora perderse en el horizonte
verde del bosque que la bordea, al otro lado de los visillos blancos como las
velas blancas del barco de su corazón.
Si
al menos esa osita de la cantina quisiera embarcarse con él en este
vuelo… Por ella construirá el barco que será su propio barco, por ella será capitán por siempre de su destino, a ella le ofrecerá su anillo y el
parche que no necesita pero con el que cubrió su ojo la tarde que escuchó en
el puerto que a esa osita de cantina le gustan los piratas tuertos…
...:)...
Y
hasta aquí mi aportación a la historia de Zarpas y su amor por Marinela… En
vuestras manos dejo su travesía desde “El Arrecife de Coral” -la cantina en que la conoció- hasta la isla
de su sueño y la decisión de si la recorrerá solo o en dulce compañía.
Solo os
pediré que, aún siendo consciente de que el amor de un pirata es poroso al
caprichoso vaivén de las olas, no dejéis de reparar en el tatuaje que hizo
grabar en su brazo con la letra del amor de sus tesoros y espero ansiosa a
que me contéis si esa luz en la mirada de Marinela responde solo al reflejo de los diamantes con los que el pirata la engalana o es la estela de los cometas que atrapará con él en la
bahía de su romance…
Imagino que habéis reparado en Avery :)... es un raro ejemplar de loro Daragón que Zarpas trajo consigo la noche en que volvió a puerto después de haber dejado su cofre enterrado bajo la raíces del árbol de su isla...
Debe su nombre al legendario Henry Avery, el pirata que jamás fue capturado y que, satisfecho con lo conseguido en sus años de piratería, decidió no volver a embarcar y perdió su rastro en una lejana isla en la que disfrutó de su botín y del amor de la princesa a la que ofreció su anillo :).
:) Al abordaje, Zarpas!!!
Zarpas va a ser el quinto de mis libros... ya está en la imprenta! Pero esa será otra entrada...
:)
oh mon dieu, Zarpas capitán de aquel bajel pirata que llamaban por su bravura El Temido, de todo el mar conocido de uno a otro confín ...va a embarcarse en una singladura mucho más peligrosa que todas las anteriores...? avísale que en esta ocasión puede perder el corazón ...
ResponderEliminarHistoria preciosa de aventura y amor... Aver grita Marianela.... a todos los vientos para que el encuentro con Zarpas en ese nuevo barco sea su mejor aventura e interminable.
ResponderEliminarUna gran coleccion de libros...
Un abrazo
Maite
Para mi no hay ninguna duda. Marinela tiene una cara de lista que no se puede aguantar y no va a dejar escapar a ese pirata tan guapo que hasta está dispuesto a simular ser tuerto para conquistarla.
ResponderEliminarYo imagino un final feliz. Les veo danzar a la luz de la luna al ritmo de las olas y hasta puedo ver una pandilla de oseznos sentados alrededor de una hoguera oyendo las aventuras que su padre, Zarpas, les contará, bajo la sonrisa benevolente de Marinela.
Ainssssss que bonito!! ♥♥♥
Elen, te felicito por esta nueva historia tan llena de todos los ingredientes de un buen libro.
Besos
Justamente lo que ha dicho Vic queria decir yo, Marinela está loca damor por zarpas no hay mas que vela como enseña la liga la coqueta della,y ya se ve venir que tendran dos o tres zarpitas y marinelas...ayyy!! Lamur....¡¡¡
ResponderEliminarBella la storia di questo pirata.
ResponderEliminarZarpas e Marinela sono belli e simpatici.
Brave, one eyed, one legged, Henry Avery the Bear pirate found love. Thank you for this lovely story and wonderful miniature work.
ResponderEliminarHugs, Drora
Me encanta la historia de Zarpas. Habéis visto lo guapísimo que está en el barco y enseñando su tatuaje¿ Cualquiera no se enamora de él. Guapo. Besos. Feli
ResponderEliminarWonderful story :) Fantastic pictures of the pirate and his great love.
ResponderEliminarHugs Maria
Que historia mas chula la de zarpas!1beso
ResponderEliminarJajaa.... me muero con la pata de palo ,el chaleco con su cinturón , los gorritos, el parche y... pobrecito las aventuras que lleva y las que le quedan .. me encanta la historia , el tatuaje ..jejej y Marinela .Pues que me gusta todo. Besosss
ResponderEliminarPreciosa la historia de Zarpas, y por supuesto que Marinela se ira con el hasta el fin de los mares.
ResponderEliminarUn beso. Teredu
El libro va ha ser todo un éxito. Una historia de aventuras y para mi que con un final feliz.
ResponderEliminarPreciosa historia con todos los ingredientes necesarios de una buena historia. Zarpas y Marinela es la pareja más adorable que he visto en mucho tiempo, yo también abogo por un final feliz :)
ResponderEliminarQuiero pensar que será amor verdadero, del que dura toda la vida y más allá, a pesar de piratas sin escrúpulos, tiburones de mil aletas, e incluso, a pesar de islas sin tesoros.
ResponderEliminarBonita historia.
Besitos
Me encantan las historias de aventuras piratas y Zarpas me ha enamorado.
ResponderEliminarY las de amor también.....
Después de llevar una vida tan dura, la pérdida de su pierna, la traición de su amigo... Yo creo que el Karma tiene que compensar a Zarpas y vivir feliz junto a su osita!!!, no puede ser de otra forma.
ResponderEliminarPobrecico zarpas!!!
Una gran aventura la de hacerse pirata,demasiado joven a conocido la desgracia de la traición por parte de un amigo y la pérdida de su pierna,cuantas vicisitudes ha tenido que pasar el pequeño Zarpas!!!! Espero que la nueva travesía del amor por Marinela le lleve a buen puerto!!!!
ResponderEliminarBesos.
Hola. Marianela y zarpas forman una preciosa pareja. La vida con un pirata es toda una aventura. Me encantan todos esos detalles que incluyes en las fotos como la espada, el gorrito, el baúl con la calavera... Qué vida el amor! seguimos en contacto
ResponderEliminarA mí me ha impactado que un pirata tenga un amigo y sea víctima de una tradición......y de ello saco la conclusión de que en todo desierto hay un gran pozo aunque sea difícil de encontrar..... Y que todos tenemos pozo, más visible o menos pero un pozo, al fin y al cabo..... Como interpreto yo las historias, jaaaaa.
ResponderEliminarUn besazo, Zarpas y Marinela y su historia y..... Son unas creaciones geniales...
Cuantas cositas le han pasado a Zarpas! pero con su amor por Marianela será recompensado..¡que dulces son los dos! Un beso
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