Acabo de pasar un rato acariciando a mi gato... me encanta ver como se abandona, tan confiado, tan despreocupado... A mi lado, Valeria acariciaba a Gus que también se abandona, tan confiado, con esos ojos tan enormes y tan llenos de consciencia y de gratitud...
A mi gato lo abandonó su madre, al Gus de Valeria no sabemos quien. Lo recogimos de la acequia en un día de tormenta cuando corríamos a buscar resguardo. Ni siquiera entiendo cómo pudimos verlo porque es del mismo color que el barro que lo envolvía y tan pequeño como el recodo en el que ingenuamente buscaba cobijo.
En qué poco a veces está la vida... lo que marcó su destino aquella tarde fue simplemente que pasamos por allí, que a pesar del aguacero nos detuvimos ante lo que nos pareció un quejido... que ante su fragilidad y su vulnerabilidad nos conmovimos... está vivo, libre y confiado porque aquella tarde nos importó lo suficiente como para hacer un alto en la carrera, de otro modo, se lo hubiera llevado el río.
A mi gato lo abandonó su madre, al Gus de Valeria no sabemos quien. Lo recogimos de la acequia en un día de tormenta cuando corríamos a buscar resguardo. Ni siquiera entiendo cómo pudimos verlo porque es del mismo color que el barro que lo envolvía y tan pequeño como el recodo en el que ingenuamente buscaba cobijo.
En qué poco a veces está la vida... lo que marcó su destino aquella tarde fue simplemente que pasamos por allí, que a pesar del aguacero nos detuvimos ante lo que nos pareció un quejido... que ante su fragilidad y su vulnerabilidad nos conmovimos... está vivo, libre y confiado porque aquella tarde nos importó lo suficiente como para hacer un alto en la carrera, de otro modo, se lo hubiera llevado el río.
Como perro he de reconocer que es un desastre... aparte de una raza indescifrable, tiene el cerebro de un mosquito, es torpe como los pulpos de los garajes y tropieza con todo lo que se le pone por delante; come con la avidez de los que han conocido el hambre y tiene un pelo ingobernable. Aún no sabe que no hay que escarbar en las jardineras, ni hay forma de que comprenda que con las zapatillas no se juega, pero cuando te pone la vista encima y ladea la cabeza... cuando se acerca y se recuesta buscando el contacto a los pies de mi muñeca... cuando salta, ladra y mueve el rabo con tan incontenible alegría, cuando corre como un puma campo a través y a todo lo que le dan las patas y se aleja libre hacia el horizonte para de pronto girar y regresar de nuevo... cuando lo miro, me hace sentir su alborozo... y una punzada en lo más profundo del alma porque sé de hombres que no van a tener esa suerte... sé de hombres a los que se va a llevar el río porque nadie se detendrá, ni a nadie le importarán lo suficiente...
Esta vez, el vestidico de mi Valeria es de su tía Azu :), rojo... como el combustible que mueve los corazones que traen la suerte...
:)
Se llama Gus ese perrico tan guapo? A mi me suena a nombre de ratón pero está claro que tu eres la que más sabe de estas cosas. De cualquier forma es tierno y adorable además de simpático.
ResponderEliminarY Valeria no puede estar mas preciosa con ese vestido rojo de Azucena's World. Me encanta 😍😍😍😍
Muchos besos, hermana 😙😙😙
Valeria, preciosa con ese vestido tan bonito y que le sienta de maravilla.
ResponderEliminarGus, es una monada, pequeñito y muy gracioso.
Que suerte ha tenido de encontraros.
Me encanta Gus y su historia.
ResponderEliminarEl vestido es chulo,con un color muy favorecedor.
y tanto que tuvo suerte ese bichillo...y Valeria también con su nuevo outfit
ResponderEliminarMadre de mi corazón....cuantas calamidades!! Suerte ca caído en guena casa.El vestido que vi a decite mija...🙎🙎🙎🙎🙎🙎
ResponderEliminarBUEN DESTINO LE ESPERABA, IGUAL QUE A VALERIA QUE TIENE TIAS, MADRE Y PERRITO PARA JUGAR
ResponderEliminarEsta guapísima de rojo.
Un abrazo
Maite
Que buen destino le esperaba a Gus,después de tantas calamidades,estaba escrito que fuera el compañero fiel e ideal de vuestra casa.Es tan dulce y simpático que roba el corazón y una sonrisa nada más ponerle el ojo encima!!!!
ResponderEliminarY hablando de ojos,no será que se tropieza con todo porque tenga mal la vista???? yo le llevaría a que se la miraran!!!
Y el vestidito de Valeria es una preciosidad!!!!!!
Besos.
Yo tengo dos peludos de carne y hueso, Neo y Hera, que son como Gus, alguien no los quiso en su día y ahora están en mi casa. En realidad Hera es de mi hija pequeña, pero por distintas circunstancias, está conmigo. Y Neo me ayudó a mí a salir del dolor inmenso con el que la vida me golpeó.
ResponderEliminarBesitos
Lindo Gus y suerte que está en buenas manos. Muy linda tu Valeria con su vestido. Besos
ResponderEliminarSe me arruga el corazón con la historia de Gus pero luego se me desarruga al saber que ha llegado a las mejores manos. Y Valeria está muy guapa con esa maravilla de vestido rojo. Con las tías que tiene imagino que va de guapa por la vida :)
ResponderEliminarQue mono el perrito Elena y Valeria está preciosa con ese vestido. Un beso
ResponderEliminarYa no se si te falta algún animalito .. una cucada Valeria su vestidito y Gus.. todo un amor .Bsss
ResponderEliminarAmigaaaa!!! como estás preciosa?
ResponderEliminarYa veo que a destajo por aquí,rodeada del cariño de tus pequeñas que cada vez las pones más bonicas ;)
El perrito es una ricura y el vestido no podía ser para otra que para nuestra Valeria,ella siempre risueña,se le ve feliz!!!
Bss apretaos!!!
Madre míaaaa!!! qué cachorrete más salao!!
ResponderEliminarHay que ver la suerte que tiene tu niña con esa modista de postín.
Nuri (Balky)
Chiquitin y lindo Gus, casi abulta el nombre mas que el..jjj... una monada... y ese vestido, yo le tengo mania al rojo, pero ese vestido queda genial en Valeria...bss
ResponderEliminarMuy cariñosa la mascota de tu Valeria y por supuesto ella esta monisima. Un Beso
ResponderEliminarTeredu