Volvimos a buscar aquel trajecito malva... pero ya no estaba; como algunas otras pequeñas cosas que yo recordaba del camino y que tampoco estaban... Cuesta acostumbrarse a esta permanente añoranza...
No sé si a mis pequeños les pasa lo mismo, creo que no... pienso que donde yo intento reconquistar ellos, sencillamente, asaltan; por eso yo voy despacio, tratando de afianzar bien un pie antes de apoyar el otro, y ellos corren y saltan mirando al sol como si el suelo resultara irrelevante. Quiero que entiendan, que sean pacientes, pero me resulta muy difícil encontrar el equilibrio entre el miedo y la prudencia... No quiero que vivan asustados, perder el miedo es el primer paso para recuperar lo perdido, pero tampoco quiero que den saltos en falso... complicado...
De momento nos vamos apañando; nos quedamos cerca de casa donde el campo es lo suficientemente grande como para que no haya que ponerle puertas...
Visitamos a unos pocos amigos, siempre los mismos y nunca todos la misma tarde...
...y recogemos flores...
...o reconquistamos a la orilla del lago los atardeceres prometidos en tantas tardes de ventanas y balcones...
...montamos en bici... ♥
En definitiva, vivimos la "vidafuera" y nos hacemos fotos que nos ayudan a creer que sí, que sigue ahí al alcance de nuestra mano...
No tengáis miedo, pero escuchad a vuestra memoria y sed muy prudentes, por favor, hay mucho por reconquistar al otro lado de la ventana...
😃💖